Cuando llega el verano, a muchas personas nos apetece pasar los días de vacaciones metidos en la piscina para refrescarnos en el agua, y así deshacernos de esa desagradable sensación de calor. Sin embargo, las piscinas necesitan ciertos cuidados para poder tener el agua en condiciones para poder bañarse sin problemas. Entre estos cuidados continuos se encuentra el cloro.

Este elemento químico se encarga de la desinfección, purificación y de mantener el agua en perfecto estado, ayudando a la erradicación de hongos, bacterias, virus y parásitos. Por ello se suele utilizar en cantidades pequeñas tanto en suministros de agua potable como en el mantenimiento de piscinas. Es un producto potente y efectivo, pero, además es bastante económico y sencillo de aplicar.

Sin embargo, un uso excesivo del cloro puede resultar perjudicial para la salud, ya que puede producir irritaciones en los ojos, en las mucosas y en toda la superficie de la piel. Asimismo, este elemento también puede deteriorar los equipos de limpieza y mantenimiento de la propia piscina que se encuentren dentro del agua, así como los equipos que se encargan del filtrado del agua. Si esto ocurre, se puede saber inmediatamente debido a que el cloro produce un olor muy intenso cuando sus niveles son muy elevados.

Por ello, se recomienda echar en cantidades pequeñas y muy controladas para el mantenimiento del agua de la piscina en condiciones perfectas para el baño. Es decir, el nivel de cloro ideal en la escala colorimétrica se sitúa entre 0,6 y 1,5 ppm. Sin embargo, si no lo hemos tenido en cuenta y nos hemos excedido con su uso, deberemos reducir la presencia de este elemento químico en nuestra piscina para evitar todos los problemas que acabamos de nombrar.

No obstante, puede que no todo el mundo sepa cómo hacerlo. Por ello, en este artículo te vamos a mostrar cómo bajar el cloro de la piscina según los profesionales. De esta manera, podrás reducir sus niveles de presencia en el agua, consiguiendo que tu piscina esté en las condiciones adecuadas para que tú y los tuyos podáis disfrutar de una temporada de baño de lujo.

Cómo bajar el cloro de la piscina: aspectos a tener en cuenta

Saber cómo bajar el nivel de cloro de la piscina no es tarea sencilla, ya que existen varias maneras de hacerlo, pero debes tener en cuenta algunas consideraciones que te vamos a ir exponiendo a continuación:

Haz una primera prueba de nivel de cloro

Para ello, debes hacerte con un kit de análisis especial del agua. Es un método muy sencillo de utilizar y mide los tanto los niveles de cloro como de pH de la piscina. Es la mejor forma de averiguar cómo de elevados son los niveles de cloro de la propia agua y te ayudará a saber qué debes hacer a continuación.

Debes de tener en cuenta que, si el nivel de esta sustancia química en el agua se encuentra en un nivel superior a 5 ppm, el baño es desaconsejable y, si el nivel es superior a 10 ppm es peligroso estar en contacto con el agua, ya que puede producir irritaciones importantes, especialmente en las mucosas y en los ojos.

Detener la cloración es lo más lógico

Si quieres bajar el cloro de la piscina, lo más sencillo es evitar que se produzca más cantidad en la misma. Por ello, debes sacar del agua todas las fuentes que están añadiendo más cloro al agua, como, por ejemplo, el clorador. Así la presencia de esta sustancia química en la piscina no seguirá subiendo.

Deja la piscina expuesta a los rayos de sol

El sol tiene la capacidad de eliminar el cloro con su simple exposición. Por ello, si hace buen tiempo, deja que el sol haga su trabajo. En pocas horas, los niveles de este elemento químico en el agua habrán descendido notablemente. Puedes volver a repetir la prueba de medición de los niveles de cloro para asegurarte de que estos se encuentran más bajos o más aptos para disfrutar del baño.

Cuando esto ocurra, debes volver a activar la cloración para que el agua no se deteriore. Para acelerar el proceso, puedes filtrar el agua de la piscina de forma continuada para conseguir que se evapore más rápidamente y que el compuesto se vaya diluyendo.

Báñate en la piscina con familiares o amigos

Esta es una buena manera de bajar el cloro de la piscina, pero debes hacerlo con cuidado, ya que, si los niveles son superiores a 5 ppm, se desaconseja el baño. Esto se debe a que el cloro sirve para mantener el agua de la piscina libre de bacterias, hongos, virus y suciedad en general.

Por ello, cuando la gente se mete dentro del agua, este elemento químico actúa frente a los patógenos externos que entran en contacto con la misma, como puede ser el aceite natural que todos producimos en nuestro cuerpo. De esta manera, conforme más personas se estén bañando, el nivel de cloro va a ir descendiendo. Puedes repetir la prueba para saber si los niveles ya son perfectos para el mantenimiento del agua de la piscina en perfectas condiciones.

Renueva parte del agua de la piscina

Otra manera más sencilla de lograr bajar el cloro de la piscina es vaciando parte del agua de la piscina y llenando la misma con agua limpia que no tenga ningún tratamiento de cloración. Este método se suele aplicar cuando los niveles de cloro son demasiado elevados, es decir, cercanos a 10 ppm.

De esta manera, la presencia de este elemento químico en el agua se reducirá drásticamente en muy poco tiempo. Sin embargo, debes tener en cuenta que tendrás que reponer el resto de productos químicos para el mantenimiento de la piscina. Ya que, al cambiar parte del agua, también los habrás eliminado.

Bajar el cloro de la piscina: razones para hacerlo

Hemos dicho que unos niveles demasiado altos de cloro en la piscina son perjudiciales tanto para la salud humana como para el mantenimiento de los equipos de la propia piscina, ya que estos se pueden deteriorar rápidamente en estas condiciones.

Además, en cuanto a la salud, los efectos de la presencia elevada de este elemento químico en el agua pueden mostrarse primeramente en forma de irritaciones de los ojos, de la parte interna de la nariz y de las mucosas, así como el enrojecimiento de la piel tras un corto periodo de tiempo en el agua.

No obstante, también pueden surgir problemas tardíos, como la sequedad en la piel, que se puede mostrar desde unas horas a unos días tras el baño, especialmente en personas con la piel sensible. Además, se pueden dar problemas respiratorios, ataques de tos, problemas de asma y daños en el esmalte de los dientes (en el caso de que el agua excesivamente clorada entre en contacto con nuestra boca).

Cómo bajar el cloro y el pH de la piscina al mismo tiempo

Hemos visto cómo bajar el cloro de la piscina, pero a continuación vamos a ver cómo bajar el cloro y el pH de la piscina al mismo tiempo. Debes saber que el pH es la medida que permite determinar si el agua es ácida, neutra o alcalina. Un buen nivel de acidez en el agua suele ser de entre 7,2 y 7,6.

Existen determinadas maneras de reducir los niveles de pH en la piscina, como puede ser, por ejemplo, utilizando productos químicos para arreglarlo. Es la opción más rápida y efectiva. Sin embargo, existe una manera de hacerlo descender junto con el cloro al mismo tiempo. Tan sólo debes dejar el agua de la piscina expuesta al sol, ya que elevará la temperatura de la misma. De esta manera tanto los niveles de cloro como de pH en el agua descenderán.

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